sábado, 30 de julio de 2011

El hombre promedio

Siempre que sale el resultado de un estudio, o una encuesta, sale esta frase que intenta englobar a un cierto grupo de hombres sin especificar en un rango de edad un poco dudoso. Suele estimarse que son hombres entre los 25 y los 35 años, con uno o dos hijos, con un sueldo que no supera los  25.000 anuales. Si está bien, son el promedio de los hombres, es decir, que una mayor parte de los mismos en este rango de edades poseen estas cualidades, o al menos de eso nos quieren convencer. Quién es el hombre promedio? Yo conozco algunos dentro del rango y características de los promedio, pero que de promedio no tienen nada.

Casado con hijos si, y hasta ahí cumple con la regla del Hombre Promedio, pero este personaje supera ampliamente la expectativa de las encuestas. Opiniologo con todas las letras, el tipo puede hablar absolutamente de todos los temas, Fútbol, Política, Economía, Espectáculos, Tecnología, etc, absolutamente todos los temas están dentro del rango de su capacidad de opinión. Monologuista espontáneo, el señor es capaz de retenerte como un secuestrador por más de una hora exponiéndote sus teorías, pruebas, errores y experiencias sin que se lo preguntes. Ni intentes interrumpirlo! Apasionado, el tipo no es capaz de retener su lengua al momento de escuchar palabras claves que desatan temas urticantes de los cuales tiene y necesita exponer su opinión y punto de vista. Siempre mal identificado como el Sábelo Todo, se gana el odio de los más jóvenes cada vez que escucha alguna queja por las horas que trabaja, o por los pedidos de su padre. Siempre un hijo ejemplar, la edad que tiene no cuadra con la cantidad de experiencia que este personaje alude tener. Tan convencido está de lo que dice, que es capaz de apostarte cifras importantes y poner su apellido en juego, con tal de convencerte de que es como el dice. Especialista en Todo, nunca lo vas a agarrar despistado y siempre va a quedar bien parado.

Otro de los hombres "promedio", con esposa e hijos, es el que a pesar de cumplir con todo lo establecido por el patrón normal del desarrollo de un hombre (si se puede llegar a decir normal), estar en la edad y tener las características promedio, más de una vez hace como que no los tiene, o mejor dicho se olvida que los tiene. No juzguen mal, el en realidad no es una mala persona, lo que pasa es que por períodos de una suerte de lagunas mentales, en donde cree que tiene 10 o 15 años menos,  toma decisiones como si no tuviera una sola experiencia en la vida. Organiza campeonatos de Play, va a jugar al futbol a pesar de que su médico le recomendó no hacerlo por el bien de sus meniscos y su exceso de peso, sale a comer con amigos a restó o lugares de comida rápida sin tener para nada en cuenta el control de su colesterol alto (como le dijo el médico), y si en algún momento de la noche su esposa osa llamarlo o mandarle un mensaje para saber si viene o si está bien,  responde seco y cortante y en modo de queja, como si ella fuera una especie de réplica de su mamá que no lo deja vivir en paz. A diferencia total de nuestro anterior representante del promedio habitual, este personaje no lleva la línea de una conversación, no posee un discurso armado ni tiene ganas de escucharte ni que lo escuches por más de 10 minutos, es más, puede bollar en un mismo tema repitiendo durante horas la misma frase que dijo último para retomar el tema en donde lo había dejado como para que sientas que te está dando bola y lleva la línea del tema. Fanático de las películas de acción  y de los asados de fin de semana, nuestro personaje requiere de una dosis semanal de alguna de ellas del tipo Trasnformers y de alguna juntada entre amigos para jugar a la Play y obviamente comer.
Otra de las personas que se puede decir que entran en el habitual promedio, son jóvenes de entre 21 y 26 años, que se casaron chicos y ya viven una vida familiar plena. Son felices, eso no se niega, pero más de una vez presentan un desliz que los lleva a querer actuar como si estuvieran en plena libertad como hace dos años atrás, y se chocan con la realidad de que ahora son padres de familia y el jefe de la casa. No te lo van a decir nunca, pero los rasgos en su cara de no haber dormido porque el/la bebe aun no duerme cuando se debe, te lo dicen TODO. Siendo simpático normalmente, en estas situaciones hasta le cuesta esbozar una sonrisa, y se vuelve poco tolerante. Su capacidad de diferenciar una habitual broma de una charla seria se ve adormecida y distorsionada y por lo general no se da cuenta de que hiere susceptibilidades. Dejó de afeitarse, dejó de vestirse bien, y su vida se limita a cumplir con la rutina. Como nenes con juguete nuevo, siguen sin tener la capacidad de resistirse ante novedades tecnológicas consolas de video, computadoras, celulares; obviamente ahora con la dificultad de tener que además comprarle y explicarle el uso de los mismos a sus simpáticas pero poco hábiles esposas. Sin contar que tiene que ser todo a prubea de caidas y de babas en cantidad. Adelantados, es una forma un poco más feliz de representar a estos chicos promedio.

Otro tipo de hombre, que está dentro de este rango que hombres promedio, son los que disimulan, disimulan estar y ser normales, pero si mirás un poco más adentro, no son lo que demuestran. Generalmente callados, amigables y cordiales, hombres totalmente correctos de lo cual no hay duda, estas personas sonríen sin problemas ante cualquier circunstancia. Lo que te sorprende de ellos ciertos arranques de expresión poco habituales, chistes que no suenan a chiste, y que te hacen sentir totalmente incómodo, bromas pesadas, en las que querés pegarles o insultarlos, pero los ves y no podés, porque no lo suelen hacer. Es como que tienen un permiso especial para hacer ese tipo de jugarretas cada tanto, de las que no podés reaccionar ni decir absolutamente nada, porque el resto del tiempo son normales, sensatos y correctos y te hacen sentir que el que no tiene los patitos en fila sos vos. Además, su poca habilidad expresiva te hace dudar, no sabes si es un chiste, es una broma, un comentario o acción al pasar, o algo trágico. Resultado, quedás como un tarado que más que ser un vivo bárbaro, terminas catalogado por él como un tipo lento y de pocas luces.

Después existen los contarios a los anteriores, sobre todo entendamos que estos son por ahí personas mayores del promedio en edad. Decía, uno de los que siguen, son esos que sienten que están mal ubicados en la vida, pero que en realidad son desubicados. Son de esos padres que sus hijos adolescentes/jóvenes corren para que nadie se de cuenta de su parecido físico y los relacionen de familia. Se creen que pueden igualar a los Midachi en un escenario y sin un guión previo, son los que suelen darse cuenta de cada detalle del resto de los comensales en una mesa y reírse de ellos como si a todo el mundo le cayera bien. Porque si, creen que le caen bien a todo el mundo, "si yo un viejo simpático, no como la mayoría de los viejos de tus compañeros". No es que no sean graciosos de vez en cuando, pero es como que la edad les terminó de fundir el regulador de cordura, y no tienen sentido de la ubicación. Son de los que hacen chistes en funerales, y se ríen si les contás que te rompiste una pierna o se murió tu mascota. Lo peor, si no te reís te pegan, literalmente te pegan, y si te quejás sos un maricón o que cuantas cosas peores. La edad les pesa, pero nunca se van a hacer cargo, nunca los vas a ver usar lentes para leer, ni ropa acorde a su edad, ni nada parecido. Promedio, nunca.

Después están los hombres de tipo Ermitaños, poco sensibles, poco sociales, desinteresados totales, ellos pueden tener su vida formada, pero dando un vistazo audaz por encima de sus vidas, te da a pensar cómo hizo para conquistar a su esposa sin hablarle. De rostro fijo, no esboza una sonrisa ni por casualidad, nunca se va a reír viendo una comedia, ni llorar siquiera en el nacimiento de su nieto. No baila, no juega, no se ríe, pero tampoco llora. No festeja absolutamente nada, ni los chistes, ni los logros, ni siquiera si Argentina sale campeón del mundo. Es como si alguien se hubiera llevado a algún lado su capacidad de sentir, o le quemaron el fusible, no sé. Su esposa e hijos siempre son 100% amables y simpáticos. Atentos a todos los detalles, y sobre todo, lograron desarrollar una capacidad especial para reconocer los sonidos guturales con los que se comunica su progenitor y esposo. No puedo decir que son felices o infelices, nadie lo sabe, ni siquiera una encuesta.

martes, 26 de julio de 2011

Hombres Complejos: Mr Músculo

Mr Músculo es, sin lugar a dudas es, como alude su nombre,  el tipo que vive adentro de un gimnasio, cuyo aparente único objetivo en la vida es hacer crecer sus músculos y entrar en remeritas muy ajustadas para que además te des cuenta de que los tiene. 
Puede ser que para muchos, Mr Músculo solamente quiera llegar a ser fisicoculturista y nada más. Pero no, no es fisicoculturista, este personaje no tiene una meta establecida de a dónde quiere llegar o de esforzarse por ser una figura del Físico culturismo. 

Mr. Músculo, por encima de ser aficionado de los gimnasios, intenta las veces de ser además una especie de regulador de la masculinidad del resto. Todo lo que los demás hagan que no involucre tres a cinco horas de gimnasio y levantamiento de pesas de más de cincuenta Kilos, cae en categorías tales como "que al pedo que está", "Eso es de gays", "Eso porque no tenés estos bíceps". Claro! porque el tipo se sabe todos los grupos musculares, sabe indicarte donde quedan los bíceps, tríceps, aductores, abdominales, glúteos y gemelos sin repetir y sin soplar. Sabe para que es la Creatina, la proteína en polvo, y todos los demás aditivos que se les puedas ingerir para ser más grande. 

Como dije Mr Músculo no quiere ser Físico Culturista, casi, pero no. Vendría a ser como la Zulma Lobato de los Físico Culturistas, sabe que en realidad hace algo medio berreta, pero como siempre hay alguien que lo mira, no se hace demasiado problema por avanzar en concretar un objetivo mayor. El tipo va a querer siempre ir a los boliches de moda, siempre vestido exactamente igual: Zapatillas blancas, un jean azul oscuro y una remera de Morley Blanca. No el frío no cuenta, no lleva campera, además no le cierra ninguna. Baila electro, si es que podemos decir que baila, porque lo que hace son movimientos discontinuados y torpes que, sumados a el flash del boliche y el reflejo de la luz negra en su remera Morley Blanca, suman puntaje como para que no digan que no mantiene el ritmo. En realidad el ritmo lo llevan las luces, pero esa es otra cuestión.

Si lo vez a Mr Músculo afuera del boliche, su atuendo habitual son pantalones de Jogins Azules y remeras o musculosas blancas, sobre todo musculosas. Y zapatillas grandes del tipo Nike con cámara de aire o similares.  Lentes de sol tipo deportivos y una riñonera. Si, riñonera. Nadie sabe de qué vive Mr Músculo, pero podemos tener alguna idea, atiende en quioscos o multirubros, o trabaja en lugares en donde tenga que estar o parado o sentado sin mucho esfuerzo más. Si el lugar donde trabaja no exige uniforme, lo vamos a ver vestido de la misma forma que lo vimos en el gimnasio, y en la calle y en donde la vida nos lo ponga por delante. 

Mr Músculo no sabe hacer ni pensar ni decir nada que no tenga que ver con sus músculos y como lo ayudaron a tener levante el fin de semana. No sabe cocinar cosas que no tenga alto contenido proteínico, y si le pedís que haga algo sin una licuadora se le complica bastante. 
No hay nada más divertido para Mr. Músculo que ver pobres mortales llegar al gimnasio donde él ya tiene comprada su plaza desde 1983, para intentar tener algo de músculo. No piensa que el resto que vamos a un gimnasio solamente por diversión, la diversión para él es intentar darte consejos y demostrarte una y otra vez como él levanta cosas que vos no podes levantar.

La vida de Mr Músculo de afuera puede verse de dos maneras, podes envidiarlo de alguna forma porque tiene la espalda y los brazos que vos no tenés, o por otro lado, podes sentir pena porque el tipo no tiene dos dedos de frente, y eso que los tiene gruesos y musculosos. Más allá de lo que pienses, o no, a Mr Músculo poco le preocupa, no por ser un superado de la vida, simplemente el tema lo supera. No entiende. 

jueves, 21 de julio de 2011

llamar la ateción

Otra verdad a la que nos tenemos que enfrentar queridos compañeros lectores, es que uno en  mayor o menor medida quiere siempre, o intenta llamar la atención. Seguramente ya saltaron algunos diciendo "hablá por vos!" pero seamos sinceros, nos encanta saber que alguien (que suele ser ella en la mayoría de los casos) nos está poniendo atención.  Viendo ciertos personajes, vamos a describir lo que yo llamo niveles para llamar la atención. Es como si a medida que pasa el tiempo sin resultados, esa necesidad del hombre como que se vuelve más imperiosa, y el nivel de agresivdad en la técnicas que utiliza para llamar la atención va aumentando.

nivel uno: "No de verdad todo bien, no me pasa nada"

Una forma sutil que tenemos los hombres para llamar la atención, es el silencio. Así de simple puede sonar, que para la mayoría puede significar un tiempo de reflexión a solas, el cual llama la atención sobre todo del sexo opuesto. Las mujeres suelen hablar demasiado, y expresar sus necesidades, sentimientos y dolores sin filtro alguno. El hombre por su parte no, suele tener épocas de meditación donde intenta descifrar algunas cosas que a su criterio no están del todo bien, pero más allá de eso, cuando descubrimos que alguien puso el ojo en nosotros y de pronto lo sacó, surge esta arma infalible. Hacer silencio. Nos encanta que nos digan "estas bien? te noto muy callado". Nos gusta que indágen, que pregunten, que insístan, que seamos el foco de atención de una tarde entre amigos, por el sólo hecho de quedarnos callados.  Normalmente no nos pasa nada, pero como no nos dán la imprtancia a la que estamos habituados, sentimos la necesidad de generar un cambio de actitud de nuestras conductas. Por lo general, resulta fácilmente, sobre todo si el que usa este nivel de llamar la atención suele ser alguien que habla mucho, o una persona socialmente sana. Con dos o tres veces que uno le pregunte, el hombre siente que volvió al dominio y ya está. Algunos pueden decir que no, simplemente es la forma más común de los hombres de intentar resolver ciertas conflictividades internas. Si en realidad estuviearmos preocupados por algo y eso nos hace pensar y quedarnos callados, no vamos a ver a otra persona, nos quedamos en casa solos, no queremos que nos pregunten. Si nos quedamos callados en público, es porque queremos llamar la atención.

nivel dos: "Si bueno, me sale"

El siguiente nivel que considero en estos intentos de llamar la anteción  es revestirnos de un intento barato de humildad y resaltar lo que sabemos que hacemos bien. Nos gusta mucho que nos digan cosas como : "No te tenía en eso", "Che, pero vos sos muy bueno, estudiaste?": "Qué cante! qué cante!!". En ciertos momentos es como que nos da la impresión que el otro se olvidó que somos buenos para tal o cual cosa, y se nos dá por demostrar lo que sabemos hacer en un momento totalmente fuera de lugar. Si por ejemplo sabemos cantar, suele pasar que en medio de una charla, o peor, caminando por la calle en una tarde de primavera de pronto nos pica el bichito cantor, y arrancamos con la serenata de canciones románticas al mejor estilo Camila. Si sabemos bailar por ejemplo Hip hop, por decir algo al aire, buscamos el momento exacto para bairar y generar alrededor nuestro una rondita de gente aplaudiendo, y en el momento cúspide, hacer el helicóptero con un flip flap final esperando que todo el "público" grite y haga una ola. Si lo nuestro es ir al gimnasio, y tener fuerza (si se puede llegar a considerar un talento) hacemos ridiculeses como agarrar a alguno de nuestros amigos/as y levantarlo en el aire como si no pesaran nada. Y peór, si hacemos deportes como Judo, Karate, Aikido o Jujitsu, lo más seguro es que en estos ataque de necesidad de llamar la atención, revolemos a un amigo en el aire en plena avenida o le hagamos una llave para "mostrar como se hace". Hasta si practicamos Yoga, cualquier postecito o paredoncito es válido para que nos paremos a hacer la Gruya mientras vamos de paseo con amigos en un momento totalmente fuera de lugar y que todos digan "pará! Karate KID!" y sentirnos nuevamente el centro de atención.


Nivel Tres: "No posta que me pasa siempre"


Otro nivel de llamar la atención, o forma en la que buscamos ser el centro de las miradas de los demás, es tener historias o anécdotas fáciles de recordar. Qué pasa? Por lo general si la persona, si es que es una específica, a la que queremos llamarle la atención, nos está contando algo que le pasó, usamos la técnica del "también", completemos las frases: "yo tenia un tío queTAMBIÉN", "Siempre que voy al cine veo al este tipo queTAMBIÉN", "mi, primo/abuelo/tio/padrastro/maestro TAMBIÈN.." sumando nuestra anécdota, real o ficticia a la historia de nuestra/o interlocutora. Por lo general hacemos eso como para no quedarnos atrás, y sentir que estamos al nivel de anécdotas de cualquiera, y que nuestra vida es normal. Otra forma de expresar este nivel de intentar llamar la atenicón es buscar palabras clave para entrelazar nuestro discurso de anécdotas que siempre terminan en las mismas cinco que todos nuestros amigos ya se saben DE MEMORIA. Detalle que poco nos importa, porque siempre que ubicamos ESA palabra, es como que un chip la detecta  y activa en nosotros el relator de anécdotas. Ya se saben la del la fiesta de 15, la del chiste que le hiciste a tu hermano con una granada falsa, la de la vez que te caíste en una avenida principal en hora pico, en fin, se las saben todas, pero vos insistis en que son graciosas, y para peór, siempre hay uno o dos descolgados que no se las acuerdan, o nunca la escucharon que se ríen a carcajadas de las mimsas. Es virtualmente imposible que tengamos una anécdota para todo, pero como no queremos pasar desapercibidos en una conversación en grupo, usamos este nivel de llamar la atención para sentirnos integrados. 


Nivel cuatro: "no es para tanto che!"


Otra de las técnicas que usamos bastante para llamar la atención, es la que yo llamo Mr. Hide. Mr Hide es ese ser detestable y moustroso que se esconde detras nuestro, y que sale sólo ante un llamado de necesidad y urgencia. Es el que hace por ejemplo que tomemos demás, o que nos animemos a tirarnos en paracaídas, o salto Buggie. Este ser malevolo que permanece dormido, intenta hacernos reaccionar ante la falta de atención, de una forma poco habitual. Si habitualmente bailamos en una fiesta, lo primero que hace Mr. Hide es quedarse sentado y no bailar. Si por otro lado no solemos tomar mucho, nuestra reacción malévola es tomar desmedidamente sin entender que es lo que estamos haciendo. Este nivel de llamar la atención ya suele ser bastante peligroso y de ser evidenciado en formas consecutivas, es necesaria atención psicológica. Nosotros sabemos que siempre que hacemos algo fuera de lo normal va a llamar la atención, porque por más que no querramos aceptarlo, somos animales de costumbres. Nos acostumbramos y acostumbramos al resto a ser de tal o cual forma. Cada vez que hacemos cosas inusuales para nuestra forma de ser, es porque queremos y rogamos porque alguien nos diga cosas como "ey, qué te pasa? controlate man", "pará! bajate de ahí, no seas pavo", "Desde cuando vos..?". Nos disfrazamos en intentos de no demostrar nuestro miedo y nuestra falta de criterio y hasta nos queremos sentir espontaneos como si todos fueramos un grupo de Hippies tirandole flores al presidente Nixon. No no somos así, no nos queremos hacer los machos, los valientes, ni los espontáneos, queremos que nos miren!


Nivel cinco: "Te juro que no doy más"


Este nivel ya es crítico, y demuestra no solo una falta de valor hacia unos mismo, sino una vocación sincera al teatro. En este nivel, sentimos la extrema necesidad de que todos, pero todos, se apiaden de nosotros y corran a nuestros brazos cuando aparecemos en un lugar público. Inventamos situaciones fictícias como complejos personales, o situaciones familiares complejas, con el fin de poder desarrollar nuestro monólogo de lo pésima que es nuestra vida, a fin de que alguien nos termine abrazando y nos de un consejo. Los más osados, hasta llegan a quebrar en llanto en el momento justo, para darle ese toque de melodrama que tanto nos gusta causar en los demás. Somos sensibles hasta el hartazgo, y nos volvemos delicados como florecitas. Sentimos todo, si nos miran, si no nos miran, si nos hablan si no nos hablan y hasta los más acomplejados tienen el tupé de recriminarte en la cara porqué ese día lo saludaste según él "seco". Es un nivel muy elevado de intentar llamar la atención, que sinceramente en ciertas personas, merece el premio a la mejor actuación por parte de quienes lo emplean. Desde ojos llorozos, caras de dormir poco, expresiones de preocupación enmudecidas. Todas las técnicas de actuación son válidas para cuando nuestra desesperación de llamar la atención llega a este nivel. 


Nivel seis: Hacer un blog.

lunes, 18 de julio de 2011

los hombres también menstruan.

Es una verdad, las mujeres siempre pero definitivamente siempre son mas jodidas que nosotros los hombres pero, muchos de nosotros nos aprovechamos de esta fama de torpes y poco complejos para esconder detalles escabrosos de nuestras vidas. Si, chicas queridas que leen estas líneas, es verdad que decidimos mayormente rápido, y que por lo general se nos complica hacer dos cosas a la vez, que somos menos sensibles a la mayoría de las cosas y que no nos percatamos de algunos detalles como ustedes PERO, los hombres no son como se los pinta, no en todos los casos.

Una de las experiencias que de verdad marcaron mi vida de soltero fue compartir el departamento con mi hermano y tres amigos más, ustedes no se pueden imaginar la cantidad de reacciones totalmente contrarias a la tan afamada simpleza masculina uno puede descubrir en ese ámbito. Es más, yo tengo la teoría de que los hombres de alguna manera sufren períodos de cambios hormonales y emocinales como las mujeres, nomás que sin consecuencias demasiado complejas. En medio de todo este ambiente y obviamente sumando ciertas caracteristicas particulares de algunos de mis amigos que voy a tratar de no dejar en evidencia, vamos a caracterizar algunos personajes masculinos complejos.

Una de las personas que uno puede pensar que es simple y sencilla, que por trabajar en ateción al público, es simpática, atenta, cordial; en realidad no puede tener muchas deviaciones, pero si. Suele pasar que uno por lo general cuando trabaja con gente, en atención al publico, es como que se cargar una medida de tolerancia, y obviamente después de 6, 7, 8 horas de antender todo tipo de consultas, desde las más complejas hasta las más pavas, de soportar los estados de ánimo y los malos o buenos días de cientos y miles de personas, es obvio que esa medida de tolerancia se gasta. Y quienes sufrimos las consecuencias de ese desgaste somos quienes estamos cerca de esas personas. Uno de primera no entiende que alguien así llegue a la casa y no quiera charlar ni tomar mate, es como si siempre tuviera un mal día pero en realidad no, simplemente está re podrido de hablar con todo el mundo, siendo simpático y condesendiente con el resto. Es como si todos los estándares sociales de conducta se desarmaran totalmente al momento de entrar a la casa. Sus respuestas se resume a monosílabos: Si, no, nose, tal ves, aja, etc. Se esmera para ser el más croto y saparrastroso de todos, es como si la presión de la formalidad del trabajo lo transformara en un pseudo linyera con aires de hippie. Para coronar la tarde, es como si sus limites sociales también se diluyeran en la nada, tirandose pedos por toda la casa, como si fuera algo tan común como ir cantando una canción mientras se ordena o se limpia. De pronto además, es como que alguien le da una orden del más allá y se cree capaz de afrontar los problemas de todos. Es como un papá con la responsabilidad de corregir y revisar las carpetas de sus hijos y de poner el ojo en las actitudes de los demás. Usa frases como "vamos a hablar", "con esa actitud no llegamos a ningun lado", "escuchame si?", "Yo no estoy gritando!"

Otro de los hombres complejos que uno puede ir descubriendo en este intendo de la simplicidad encubierta de los mismos, son los que creen que todavía viven con sus papás  y/o que tienen mucamos y mayordomos encargados de que toda su vida siga como lo fue siempre. Increíblemente, estos hombres tienen la costumbre de entrar a la casa e ir tirando su ropa por toda la casa, esperando que "alguien" o sabiendo que ese alguien va a levantar todo lo que deja tirado. Así como el anterior, este personaje piensa que el solo hecho de estar en su casa lo hace acreedor de un pase libre para hacer cosas que cualquier otro ser en sociedad no haría ni por más que lo obliguen. Es como un nene mimado, sus frases más populares son: "Esto cocinaste?", "A ver si ordenas un poco la piesa", "Loco me dejas un rato que necesito mi espacio". Nadie sabe para que necesita SU espacio, pero el tipo cree que por estar solo sin que nadie le hable, ya es capaz de acomodar el cosmos. Ellos hablan cuando quieren o lo necesitan, no cuando estan frente tuyo o en una ronda de mates entre amigos. Aunque algunas veces, suelen tener ciretos deslises, en donde es como que se despierta con sentido de humanidad y ese día limpia la casa, plancha su ropa y hasta te ofrece unos mates. Son de esos días en los que dudas si es él, o si lo raptaron los extraterrestres y te dejaron esta mala copia. Si lo llegas a agarrar en estos días y sabes jugar bien tus cartas, es capaz hasta de cocinar, aunque nunca le sale muy bien, pero el esmero sobrenatural que le pone a esta acción hace que valga la pena.


Otra de las personas que también se esmeran en mostrar su masculinidad, de actitud hasta rockera frente a la vida, también esconden sus cosas. Son de esa personas que a simple vista no parece importarles nada, pero que si revisas en el fondo son unas madres preocupadas y asendosas. Es increible y hasta te desequilibra emocionalmente ver este tipo de actitudes de un macho hecho y derecho, que no le tiene miedo a nada. Empezando porque en esos días parece que a lo primero que no le tiene miedo es al baño, porque lo limpia sin decir una palabar, al igual que toda la casa. Con excusas simples y respuestas secas como "no me gusta la mugre", o "quiero andar descalzo en mi casa y que no se me ensucien las medias", es el encargado de limpiar absolutamente toda la casa, es además quien tiene un botiquin en su mesita de luz y sabe exactamente que tenés que tomar para un dolor de muelas, o para atacar los primero sintomas de un resfriado. Nunca llego a entender bien quién es responable de que existan hombres de estas características, pero de que los hay los hay. Ellos te mandan mensajes como "venis a comer?", "ya está la comida, hay postre!", "te sentis mejor? sino avisame y te saco un turno para el dentista". Son increibles, mamás suplentes de la vida. Así de incoherente es que los ves y los escuchas, y no das cuenta de que sean de él esos mensajes e incluso esas atenciones.

Otro tipo de hombres son los que varían de forma infrecuente, es como si fueran irregulares menstruales, uno nunca sabe qué esperar de ellos. A veces, se despiertan y son cálidos, amables y amigables, otros simplemente no te soportan y no quieren hablar con nadie. Hay días en que se levantan con el talonario de facturas y empiezan a hecharte en cara una detrás de otra, toda las cosas que hicieron: si pagaron la comida de la vez pasada, si levantaron la ropa del piso, si ordenaron la piesa y vos no se te cayó un "Gracias" ni por casualidad. Son de esas personas que te dan ganas de decirle que se tome un ibuevanol, porque no encontras forma de entender cómo son capaces de sentarse serenamente a tomar un desayuno y al minuto sin previo aviso parecen haberse endemoniado de forma increíble porque usaste el cuchillo de la manteca para el dulce de leche. Hay días que no se bancan un chiste y ni una joda, y mucho menos si el otro se anda tiarndo pedos por la casa, y hay  otros en los que parece ser el tipo más simpatico y amigo de todos. Usa frases como "che en serio que bueno", "podes dejar de gritar que te escucho si?!", "sabes qué?! hacelo vos si te jode tanto!", todas en una misma oración. Desequilibrados, no hay otra forma de calificar a estar personas.


Esto es un primer pantallaso de la compliejidad de los hombres. No es que seamos más sencillos, solamente somos menos evidentes que las mujeres. Pero si, somos jodidos.

viernes, 15 de julio de 2011

adicto.

Así nos tildan si usas mucho el Facebook, tenés Twitter y PEÓR si tenés un smartphone que te permita estar al tanto de todo lo que pasa en Internet. Ellos no entienden, la gente no entiende en realidad que vos tenés la imperiosa necesidad de estar virtualmente colgado del cyberespacio. Adicción? Puede ser, pero definitivamente no soy de ciertos especímenes que rondan las paginas de internet. Si, hay gente peor, definitivamente. Usar Twitter, o Facebook, puede ser algo muy cotidiano, pero sinceramente si no tenés la capacidad intelectual o el nivel necesario para manejar las cosas como corresponde, podes estas hundiéndote en el abismo. Hay muchos tipos de personas que rondan las redes sociales, que viven con su celular en la mano, o que no pasa un día sin que enteren a Facebook a enterarse de las "novedades".

La gente del Facebook, ganan la mayoría su cuota de "normales" porque en realidad están suscriptos solo a esta red social, o como mucho al Twitter. Pero guarda, no es que sean todos cuerdos está el tipico caso de, por ejemplo, las personas que no pueden poner solo sus nombres y apellidos normalmente y tienen que inventar arquetipos de cualquier clase y estilo para sentirse "originales". Doy algunos ejemplos: ¨Alinne Pantalones Cuadrados", o ponen en lugar de sus apellidos usan CARP, XENEIZE, BOSTERO, "Luuchii Cai" por ejemplo, que problema tienen con las vocales, aparte. Después están los cínicos que tienen dos o tres cuentas de Facebook con dos objetivos: ver sus propios perfiles siendo amigos entre ellos ó teniendo más amigos para jugar en los juegos de Farmville sin esperar que el otro responda a tu molesta solicitud para "ayudar a conseguir Tablas!"  Nadie tiene nada más importante que hacer? lo peór es que son insistentes en el tema. El Facebook puede ser algo divertido y recreativo, pero también puede ser reflejo de verdaderos problemas psicociales. "Fulano Detal dice: estoy muy pero muy mal, que día más horrible Dios, me quiero morir." Qué se supone que quiere que hagamos? que mandemos a Claudio María Dominguez a que le de un mensaje de aliento? otro ejemplo "Menganito Eledealado dice: Ay pero todos me tienen re cansado! necesito cambiar de vida" y entonces? que hacemos, una vaquita y te mandamos al Congo a ver si arrancas con algo que te haga sentir mejor? Todo bien, pero convengamos que no nos hace falta leer las desgracias o insuficiencias agenas como para decorar nuestro muro de novedes de Face. Osea, en serio, qué se supone qu vayamos a hacer con tu publicación: Le damos "megusta" y te decimos cosas como: "ay negri ya va estar todo bien!" "Vas va ver que todo va a cambiar", y con eso se te pasa? Escirbí un poema o una canción si te sentis mal, pintá un cuadro, escribí un libro, sacá fotos, hacé un Blog! De vuelta la combinación de X e Y en una misma palabra no es buena. Ni las terminaciones en U ni los diminutovos en exceso. Eso no está bueno.

Después está la gente que tiene una manía que creo, nace de el antiugo Boom de la Internet, el Fotolog. Effeame y te Effeo, seguíme y te sigo, aceptame y te acepto. Qué sentido tiene aceptar en tu Facebook a gente que en la vida real ni siquiera te saluda? Fuera de lo que puedan pensar hoy, yo suelo ser muy simpático, pero si no me saludas las 223123125423453243 veces que te veo en la calle, porqué vas a estar en mi lista de Facebook? Distinto es el tema del Twitter, ahí la gente te sigue, pero no molesta, y eso está bueno. Pero si aceptas a gente que no conoces, que de pronto tiene accesos a tus cosas, tus fotos, tus expresiones, tus comentarios, qué sentido le ven? Ponés una foto del día del padre con tu viejo que se murió, ejemplo, y un "X" le pone "me gusta" y comenta (si comenta" porque tiene el tupé de comentar!!) "aaaay que lindos que se ven, son iguales" acto seguido vos aclaras abajo "soy adoptado" y!? no está bueno aceptar gente que no conocemos. Definitivamente un NO.

Después otra de las cosas que habla mucho de como es la gente es su celular, pero no hablemos de la marca ni los modelos, no eso no. Pero si, un celular a simple vista dice mucho de como es uno. Está la gente que lo llena, literalmente LO TAPA de calcomanías. No, pero no son esas de las lindas, o que quedan bien, no es una, son muchas, gastadas y feas. De calcomanías de Barbie hasta las que vienen en las salchicas Patty de Scooby-Doo. Gastadas, despegadas,con tierra y para coronarlo tienen colgadas esos accesorios que fueron furor hace unos años que hacían luz cuando estaban con sonar, pero obviamente está rota, y junta mugre. Porque todas esas cosas que le ponen juntan mugre. Listo, no les damos categoría a este tipo de personas. Después están las otras que son obsesivo-compulivas protectoras de su celular. Desde acciones comúnes, y hasta normales como cambiar cada tanto el film protector una vez cada tanto (aunque sinceramente ya comprar film protector para una pantalla de celular me parece demasiado), hasta los que te revisan las uñas antes de dejarte mandar un mensaje. Che! es un teléfono! se va a caer, se va a golpear y se va a rallar, se va a romper, si por más cuidadoso que seas se va a romper y un día lo vas a tener que cambiar. Entonces para que la obsesión? 
Otras personas menos jodidas pero igualmente extrañas son las que tienen todas las aplicaciones existenes para sus teléfonos: Desde Juegos como el Sudoku (conozco solo una persona que lo juega) hasta un nivel en el celular, UN NIVEL! para que? para que vas, osea para que el resto vea lo asmobroso que puede hacer con un teléfono, no puede ser más inutil. Cosas que nuca vas a usar EN TU VIDA es el nivel del celular! ni hablemos la gente grasa que compra carcasas estampadas de equipos de fútbol, no puede haber nada menos combinable en el mundo que alguien que quiera estar IN con la tecología pero su poca capacidad mental le permite estar IN con el pesamiento normal.


Está bien, si somos adictos en cierta forma, pero hay pruebas fehacientes de que se puede ser peor. Sino fígense en todos los que además de un simple Twitter tienen Facebook, Myspace, Badoo, Google+, Likedin, Blaving (la red social para hablar, si semejante atrosidad existe!)  y para colmo, te envían solicitudes de amistad, a ver si te prendes en la movida. Las redes sociales son como la ropa de moda, te compras una de cada una, son todas iguales, pero te sentis más Top si no se te escapa ninguna. 


Ya se, hoy me vine venenoso, me lo acaban de decir.



 

jueves, 7 de julio de 2011

salir de casa y no morir en el intento.


Llega un momento de la vida, en donde te planteas muchas cosas que aparentemente en ese momento tienen una lógica tremenda, después con el paso del tiempo, te das cuenta que no era tan así; pero para cuando lo descubriste ya es tarde. Qué nos pasa a los hombres entre los 20 y 22 años (promediando), analizamos nuestra vida, nos comparamos con nuestro viejo y pensamos "la pucha, mi viejo a mi edad, ya había vivido en tres países, tenía dos títulos y estaba esperando a que yo naciera.. y yo qué hice?" es entonces donde una especie de revelación maquiavélica se comienza a gestar en tu mente. Basta, tenés que independizarte, no puede ser que vivas con tus padres a ESTA ALTURA DE TU VIDA! Es entonces, donde empezas a analizar el tema, revisas algunos números (los previsores) o, si son como yo, simplemente se aventuran a salir de sus casas. En casos más extremos, se van de la ciudad de donde viven sus padres porque piensan "no, si vivo acá, voy a seguir viendo a lo de mis viejos a comer, lavar ropa, etc, y yo QUIERO SER INDEPENDIENTE". No pensaste los contra de tu increíble decisión, en todo caso, no parecían tan IMPORTANTES los "detallitos"  pero después te das cuenta de que eso detallitos eran más grandes de los que parecían.

Empecemos a recoerrer de a poco la casa, y a descubrirlos. Primero obviamente está la cocina. Vos no te dabas cuenta que en realidad tu mamá tenía una capacidad increíble para hacer absolutamente TODO en tu casa. Ella se encargaba de cocinar, limpiar, lavar, planchar, y encima ser mamá y ni hablar si trabajan! No te percatabas de esas cosas, pero hoy que vivis solo sí. En mi caso, gracias a Dios tuve una mamá previsora que me enseñó lo básico de la cocina, recuerdo que cerca de los siete años ya cocinaba arroz para mi familia, y hasta ahora es lo que mejor me sale. Convengamos que igual mi mamá tuvo la desdicha de tener un hijo como yo con una mención especial en mañanas, y la Choli Berreteaga que todas las mamás tienen insertas en sus vidas murió asfixiada en mis reclamos de comida "a mi gusto"; así que en casa no había nunca algo muy elaborado. Arroz, fideos, algún guiso y una que otra tarta, lo que yo podía llegar a comer. Si, yo era capaz de jugar por todo el barrio hastas después de la hora de comer, para después aparecer con cara de hambre y que mi abuela en vez de sopa me diera papas fritas. Ni hablar cuando intervenía mi papá en la situación, y bueno, eso es otro tema.

Volviendo a la cocina de la casa si sabes cocinar, lo primero que te pasa es que vos pensabas que si, pero no, no sabes calcular las cantidades. Aceptalo. Usas exactamente cada paso como te lo enseñó tu mamá a hacerlo, por ende, si haces un arroz ahora que vivis solo, tenés como para una semana porque la medida es diferente. Si la comida que hacías en tu casa era para seis personas, y seguis La Misma Receta, obviamente si sos uno VA A SORBAR. Tardas entre seis meses a un año en razonar esto, y te das cuenta porqué es que te pasa y te aventuras a probar con tazas más chiquitas, y esas cosas.
En peores conidiciones está el que no sabe cocinar. Definitivamente no hay cosa peor que aventurarse a cocinar sin nunca haberlo intentado. De arroz quemado, a guisos desbordantes, crudos en el medio y pegados a la olla. Cosas horrendas pueden salir de esa cocina con consecuencias nefastas para tu salud y tu inodoro. Sabelo, bajas de peso. No te queda otra. Hasta que alguien con un poco más de cancha te saca del apuro y te enseña dos o tres secretitos. No te entra en la cabeza, si no parecía tan complicado. Ahora, el mañozo del que les conté, empezó a pasar habmbre, porque tu mamá ya no está para hacer tus comidas favoritas. Ahora me animo a probar cualquier comida, en serio.

Lo segundo en lo que reparas al momento de vivir solo, es en la limpieza de la casa. Cuándo limpias? Cuando hay olor. Si, esa es tu motivación principal. Cómo lo haces? Compras un pinoluz vidón de tres litros, pensando que te va a solucionar la vida. De a poco te ponés a comparar el bajo mesada tuyo con un pinoluz gigante y un trapo de los amarillos, y el armario de limpieza de tu vieja. No, perá, te das cuenta que ella tenía más de una botella. Cuando empezas a ver lo complejo de usar Pinoluz para el piso, el baño, la cocina, de a poco te das cuenta que si, existen más productos para limpiar: desengrasante para cocina, limpiador de baño, esponjas, virulanas, cepillo para el inodoro! (Hasta ese momento usabas la misma esponja para todo) consejo: ver propagandas de Mr Musculo ayuda, aunque no lo creas, te ayuda. 

Son cuestiones que parecen básicas, pero al momento de enfrentarlas por vos mismo, no lo son tanto. Lavar la ropa es la siguiente complicación que se te presenta en la vida del soltero aventurero. Si tenés la suerte de tener un lavarropas, previste el tema y sabías que era algo indispensable para la vida del hombre moderno, aplausos para vos. Si sos como el resto de los mortales, no lo tenés, porque no entendías la mecánica que transcurría entre que vos dejabas la ropa en el cesto de ropa sucia, y volvía al cajón correspondiente limpia y planchada. No, no era mágia, era otra vez ella, si! Tu mamá. Previsora mi madre igual, me enseñó a la var ropa a mano y planchar, aunque no estan en mi lista de favoritos. 
Nadie te dijo que sin un lavarropas, el tema se complicaba. Ni hablar si tenés que lavar a mano! No tenés una idea de lo complicado que es encima, si no tenés una palangana o algo parecído como para darte una mano en la tarea. Te toma toda una tarde para hacerlo, por qué? porque acumulas hasta último momento toda la ropa, como lo hacías en tu casa, y al momento de manotear un boxer y sentir su "edor" te percatas de que claro, no está limpio, no lo lavaste, y estas por salir, estas complicado! Existen dos soluciones, tratar de fijarse temprano, ó comprar ropa interior nueva para el momento, y buscar la remera que menos holor tenga. (Anotaste?) La parte buena, es que después de un tiempo boxers y medias no te van a faltar. Al momento de planchar,existen dos tipos de personas: Las mañozas que planchan TODO, y las que les da lo mismo si su ropa parece toda de tela de bambula y usan Arrugas Stile. El grado de complejidad en este sentido lo pones vos, si sos de uno o de otro tipo de persona.

Definitivamente vivir solo, tiene muchas mas complicaciones de las que pensas, detalles en los que no te percatas porque pensas que se te va la vida. No es TAN así, pero de eso te das cuenta después. Vale la pena? si, si lo vale, aunque es mucho más facil hacer caso a un antiguo consejo: Dejará el hombre a su padre y a su madre y se unirá A su Esposa. El motivo? Simple, en el pack ella trae soluciones a todas estas complicaciones de las que estuvimos hablando.

pensalo.

Si sos mujer, no pienses obviedades, es en serio, no nos damos cuenta de esas cosas. Hasta que nos pasa.